jueves, 9 de junio de 2016

Un Venezolano: “Mi Vecino es un Monstruo”



Hagamos memoria, ¿Recuerdan el paro petrolero de 2002, esas navidades que pasamos todos bebiendo Nestea y Big Cola porque era lo único que había, amaneciendo en las colas de las gasolineras, recuerdan cuando empezaron a escasear los primeros productos? fuimos tan ingenuos en ese entonces, que creímos que era lo peor que nos podía pasar, ¡Y VAYA QUE ESTÁBAMOS EQUIVOCADOS!

Fue en ese momento cuando el extinto Presidente, inició lo que el llamó un plan de “soberanía alimentaria”, para que los venezolanos no tuviéramos que volver a vivir LA ESCASEZ del 2002-2003, creando la misión Mercal a principios de 2003, no obstante, a partir del 2008 comenzaron también las famosas “Expropiaciones” de empresas productoras de alimentos (Lácteos Los Andes), más tarde otras empresas arroceras, azucareras, fueron expropiadas, así como Agroisleña en 2010, entre otras, “expropiaciones” a las que, como abogada, prefiero llamar Apropiaciones Indebidas, pero eso es otro tema.

Lo cierto es que en ESE momento, sin saberlo (algunos), íbamos directo al precipicio y es que para que haya haya oferta de bienes en los mercados venezolanos, se necesitan principalmente INCENTIVOS (Estabilidad económica y política, financiamiento para la inversión en algunos rubros, desregulación del sistema cambiario, facilidad de importación/exportación) que incidan en MAYOR PRODUCCIÓN, pues, en lugar de incentivos el Estado creó CONTROLES (Incorrectos, excesivos y permanentes) y los controles emanados del Estado venezolano, redundan en más escasez, debido a que no resulta rentable producir.

Así pues el control de precios, dio lugar a ese terrible Frankenstein llamado “BACHAQUEO”, y es que ante la imposibilidad del sector privado de incrementar los precios de algunos productos, los venezolanos aprendieron a calcular utilidad marginal de una forma muy hábil; las cosas, ante la escasez, valen lo que la gente esté dispuesta a pagar, y se termina beneficiando de ello la única persona que no invirtió ni un bolívar en la producción del producto (El Bachaquero), digo beneficia porque obtiene una ganancia de más del 500% de ese producto, sin embargo, eso es comida para hoy y hambre para mañana… COMO YA NOS DIMOS CUENTA.

Ahora lo que nos ocupa,  Hoy 9 de Junio de 2016, casi 14 años después del inicio del fin, estamos en las manos de la FAN (solo admito las siglas constitucionales), y tenemos al chavismo, vendiéndonos unos fulanos Comités Locales de Abastecimiento y Producción conocidos por sus siglas CLAP, los cuales tienen como fin: Abastecer a la población de los productos regulados a “precio justo”, de forma periódica desde el Poder Popular Organizado (entiéndase consejos comunales y comunas).

Bien, desde que surgió esta formidable idea salida directamente de Los Juegos del Hambre, hemos advertido al gobierno lo terrible que sería delegar el abastecimiento de alimentos en la propia “comunidad organizada”, por multiples razones, enumerare algunas a continuación:

1. Vamos otra vez con el Art. 21 constitucional, que se refiere a la NO DISCRIMINACIÓN por cualquier razón que pretenda menoscabar el ejercicio o goce de un derecho, y el Art. 61 eiusdem, señores chavistas, hay algo llamado LIBERTAD DE CONCIENCIA y ¿adivinen qué? Eso de que al “vende patria” ni agua, además de ser una clara promoción de odio entre los venezolanos, es una violación de DDHH, porque cuando ustedes se adjudican la responsabilidad enorme de proveer alimentos, adquirieron la obligación de hacerlo para TODOS, porque si no, sencillamente nos van a matar de hambre; de cualquier forma, esto no es una súplica, pero que quede en su conciencia, sigamos.
2. Si ya parecía imposible hacer llegar la comida a los abastos Bicentenarios (por nombrar uno del Estado), y que no se perdiera en el camino, se imaginan los canales de desvío que surgirán cuando quien debe recibir el alimento es un CLAP, cuyos miembros si les mojan la mano y le dan comida para su familia (esto último es opcional), poco les importará que el resto de la gente se muera de hambre, ¿Acaso nos convertimos en Monstruos?
3. Lamentándolo mucho, sin ánimo de ofender a nadie (conozco excepciones), los consejos comunales han resultado ser un reflejo de lo que vemos arriba, esto es, corrupción, corrupción, CORRUPCIÓN, lo que dificulta o mejor dicho, imposibilita que el objetivo se lleve a cabo. y es que por ejemplo, en Cabimas estado Zulia, ya “funcionan” algunos CLAP, en uno específico, las bolsas aparecieron fallas, nada más y nada menos que les faltaba a TODAS la  Leche en polvo; en otro, a TODAS les faltaba el aceite, y así sucesivamente, lo cierto es que hoy esos productos se consiguen en la calle a 4mil bolívares el kg de leche, desconozco el precio del aceite pero lo averiguaré.

Yo me pregunto entonces, señores del gobierno ¿A quién van a engañar?, ¿Qué pensará un chavista de esos de corazón que aún existen, cuando va a buscar su bolsa y le sacaron lo que más ansiaba encontrar, la leche para el cafecito, el arroz, el azúcar?, ¿Qué pensará el opositor al que le dicen, tu no te vas a beneficiar de esto por vender patria?, ¿Qué pensará ese chavista que ve en VTV que todo está maravilloso, que los CLAP funcionan bien, pero abre la nevera y sigue vacía?

En mi opinión, se ajustaron la soga al cuello y esta medida morirá en menos de dos meses, tal como murieron muchas otras, porque en la práctica no beneficia a nadie, no le resuelve el problema a nadie (Salvo a los corruptos), para la población sólo empeora la situación al no conseguir los alimentos de forma tradicional y deja ver el lado más oscuro de nosotros como “ciudadanos”.

Ojalá esto nos sirva para entender que las soluciones no aparecen dibujadas de la nada, que el camino para salir de la crisis es arduo y difícil, pero que no podemos seguir tolerando esta situación y adaptándonos a ella, necesitamos unirnos, si la crisis es colectiva por qué vamos a dejarnos sembrar odio hacia nuestros vecinos, por favor recuerden que todos juntos podemos ser Héroes, pero no  olviden quien es aquí el Monstruo.